Una vez escuché que para tener una buena noche hay que dejar los pensamientos de lado, y prepararse para soñar con cosas hermosas.
¡Te deseo un día a tu medida, mamá! Que puedas aprovechar cada segundo para hacernos a todos tan felices. ¡Buen día!
Todos los esfuerzos merecieron la pena, ha llegado mi momento, ¡me gradúo!
Ahora es el momento en el que se abren todas las puertas de mi futuro.
De lo que más tengo miedo es de un día no tener a mis abuelos.
Cuando estoy contigo, amiga, puedo ser auténtica y dejar de lado cualquier disfraz.
Es lindo saber que tengo en mi vida a alguien tan especial como tú. ¡Buenas tardes!
Pensaba que ya lo había superado, pero hoy he vuelto a llorar por ti.
Con una sonrisa en la boca comienzo la semana pues despierto y estás a mi lado. ¡Feliz inicio, amorcito!
La distancia me hizo entender que esté donde esté te siento siempre cerca.
Soñar es algo natural, pero soñar contigo es entrar en un mundo indescriptible e incomparable.
Hagamos simple lo que está a nuestro alcance pues ya hay demasiadas cosas complicadas que no podemos cambiar.
Es muy hermoso, pues de entre todas las personas del mundo, vosotros os encontrasteis, y hoy habéis decidido seguir caminando juntos. ¡Feliz matrimonio!
Si quieres tener un buen día, empieza con toda la familia alrededor de un buen desayuno, ¡y a por el día!
Espero que todos mis sueños se hagan realidad y pueda compartirlos contigo toda la vida. ¡Buenas noches, mi amor!