No hay mejor manera de terminar el día que hablando contigo y mandándote este mensaje. ¡Buenas noches!
En este duro momento ofrezco mis brazos para llorar, mi corazón para arropar y mi alma para acompañar.
Hay algo que siempre llevo conmigo cuando salgo de casa y es algo es mi educación.
Conocer tantas culturas como sea posible, ¡Esa es mi misión de vida!
Existen muchas personas con depresión y con falta de amor propio.
Agradezco cada una de las veces en las que pensaste más en mi que en ti propia, mamá.
Esta foto es la prueba perfecta de lo maravilloso que es compartir mi tiempo contigo.
El novio más lindo en un lugar hermoso, lo mejor que me podía pasar.
Hay quienes dicen que amarse a uno mismo es egoísta, pero yo no veo nada de malo en hacerlo.
Sale el sol y yo me acuerdo de la suerte que tengo de tenerte como mamá. ¡Buenos días!
Mirar a mi bebé es sinónimo de amor, cuidado y cariño.
De nada te servirá ser una persona hermosa si no hay belleza en tu interior.
Cuando pienso en todo lo que hiciste por nosotros, me lleno de inspiración para ser mejor.
Cuando sientas dolor piensa en mi, y habla conmigo, estoy aquí para ayudarte a curar tus heridas.
Es inevitable discutir contigo, pero aún así te valoro como a nadie más, hermano.