Aprendí a amar cuando te vi y supe que daría mi vida por ti, hijita amada.
Como no estar orgullosa de ti mi princesa, si eres la luz que guía mi camino todos los días.
Entre mis brazos tengoal bebé más hermosode la tierra, te tengo ati mi hijita, y nuncate dejaré caer.
Hijita, eres lo másvalioso de mi vida.
Hijita estoy aquí para que crezcas feliz y para que tengas una vida plena.
Lo reconozco, soy unamamá orgullosa, puessolo tengo palabrasbuenas sobre mi pequeña.
Esa personalidad tan positiva que mantienes todos los días me enorgullece de una manera que ni imaginas, hijita.
Hija, todavía eres un bebé,pero poco a poco te daráscuenta de cuanto te adoro,y de que para mi ereslo más importante.
Preciosa hija, mi corazónsiempre estará lleno deamor y ternura por ti.
Querida hija, eres el mayor orgullo que me ha dado Dios y no puedo agradecerle tanto como quisiera por tener una hija tan extraordinaria.