Soy una mujer fuerte y quien diga lo contrario, miente.
Mi abuela fue una mujer fuerte, mi mamá también lo es, y yo lo seré.
A veces cometo errores,pero siempre me levantosin ayuda de nadiey cada vez soy más fuerte.
Si miras en tu interior verás una mujer fuerte y valiente, y sabrás qué es lo que veo yo cuando te miro.
Soy como soy sin pensar en el que dirán, ¡y eso me hace ser una mujer fuerte y valiente!
Si quiero algo haré los posibles para alcanzarlo, y eso hace de mi, una mujer valiente y fuerte.
Ser mamá me hizo perder los miedos que tenía y darme cuenta de que soy una mujer fuerte.
Me basta pensar en todo lo que ya superé para darme cuenta de que realmente soy una mujer fuerte.
Busco mis referentes en las mujeres luchadoras y fuertes.
La vida me convirtió en una mujer fuerte y ahora no hay nada que consiga derrumbarme.
Superar todo lo que he superado me hizo darme cuenta de que soy una mujer fuerte.
Me ha costado mucho trabajo llegar hasta aquí, pero ahora sé que soy una mujer fuerte.
Mujer, la seguridad que transmites al andar es digna de admirar.
Si supieras toda la fortaleza que tienes no volverías a dudar de ti misma nunca más.
Mujeres fuertes hay en todo lado, pues todas tienen batallas que no comentan.
Las mujeres somos todas fuertes, solo que algunas todavía no se han dado cuenta de lo mucho que valen.
Las lágrimas y el dolor no te han impedido seguir adelante. ¡Sabes que eres fuerte!
La fortaleza de las mujeres es tan inmensa como incansable.
Apreciar la belleza que me rodea, me hace ser más fuerte.
No recuerdo un momento de mi vida en el que me haya rendido, pues siempre lucho por salir adelante.