La gratitud tiene que ver con la educación, pero también con el estado del alma.
Reconocer y agradecer a alguien que te ayudó es un acto lindo de gran valía.
Voy a agradecer hasta lo malo porque de eso también aprendí algo.
Agradece lo que tienes, por poco que sea, mañana quizás puedas extrañarlo.
Si hay algo que me gusta hacer es agradecer cuando los demás se portan bien conmigo.
Agradecer es un acto simple que puede desencadenar respuestas muy hermosas.
El agradecimiento sincero es necesario pues nos acerca a aquellos que amamos.
Aprender a agradecer puede ser difícil, pero una vez que lo hacemos, descubrimos como nos lo hace todo más fácil.
Agradecer es un acto honesto y noble que deberíamos siempre aprender.
La gratitud es un don que solo algunas personas tienen.
Agradece si realmente lo sientes, pues puede distinguirse perfectamente un agradecimiento sincero de uno falso.
Si muestras agradecimiento cuando te pasa algo bueno, ¡aumentas las posibilidades de que te vuelva a pasar!
Comencemos a agradecer más y a pedir menos.
Hay personas que con su presencia, consiguen que nos sintamos arropados. Tú eres una de ellas, ¡gracias por estar siempre!
Nunca entenderé porque hay personas a las que les cuesta tanto dar las gracias.
La palabra que sale desde nuestro corazón y enorgullece nuestras almas es: Gracias.
Lo que tengo se debe al trabajo y a los míos, por eso, yo siempre agradezco.
Cuando agradezco siento el corazón lleno.
Agradezco a las personasque hoy se han acordadode mi y que han hechoque mi día fuese más liviano.
Valoro y agradezco cada tropiezo, pues ellos me llevaron hasta donde estoy hoy.