Frases para el Día de la Madre

Que bonito es saber...

Que bonito es saber que eres mi mamá, y a la vez la amiga más fiel que tendré.

No hay nadie como tu...

Mamá, no hay nadie como tú, ¡eres mi guía en la vida!

Quiero darte gracias por enseñarme...

Mamá, quiero darte gracias
por enseñarme a tomar
siempre el camino que
me hace más feliz
y apoyarme con ello.

Uno de tus propósitos...

Uno de tus propósitos siempre fue cuidarme y hacer que no me faltara nada. ¡Gracias por tanto, mamá!

Nunca nadie me protegió...

Nunca nadie me protegió tanto como tú, mamá. ¡Te amo!

Lo más bonito de...

Lo más bonito de la vida es tener a una mamá que te ama y te comprende.

Yo estaré con mi...

¡Yo estaré con mi
mamá hasta el final!

Casi todo el mundo piensa...

Casi todo el mundo
piensa lo mismo, pero
en este caso, soy yo
quien tiene razón,
¡y es que mi mamá,
es la mejor!

No consigo contar todas...

No consigo contar
todas las ocasiones en
que estuviste conmigo
apoyándome, pues
fueron infinitas.
Gracias, mamá.

Lo más lindo de la...

Lo más lindo de la vida es tener una mamá a quien amas, a quien cuidas y saber que también te cuida.

El abrazo de una madre...

El abrazo de una madre es aquel que reconforta, que da energías, y que transmite todo el amor del mundo.

Que seas mi madre me...

Que seas mi madre me da fuerzas, y me hace tener el mejor referente para seguir adelante.

Hija mía haré siempre...

Hija mía, haré siempre
todo para que te sientas
amada y protegida.



Una madre tan especial como tú...

Una madre tan especial como tú, merece despertar con un mensaje bonito cada día. ¡Y este es el mío! ¡Buenos días!

Siempre intentaré ser mejor...

Siempre intentaré ser mejor para que te enorgullezcas y esa sea tu mejor recompensa.

Que honor y que suerte...

Que honor y que suerte tener a una madre como tú.

No tienes idea...

¡Buenos días, mamita! No tienes idea de lo mucho que agradezco por pasar este tiempo increíble contigo.

Que sensación tan hermosa...

Que sensación tan hermosa es saber que no importa mi edad me sigues consintiendo.

Mis brazos...

Mis brazos fueron hechos
para recibirte y acariciarte
siempre que lo necesites, hija.

No hay nadie que pueda...

No hay nadie que pueda ser más altruista que una madre.