Señor, quiero agradecerte por mi salud, mi trabajo y el calor de mi hogar.
Dios siempre está presente en cada una de mis decisiones, pues ¡Él sabe lo que es mejor para mí!
Imparable, constante, vertiginoso, firme, despiadado. Tiempo, ¡dame un respiro!
Cuanto más me amo y me comprendo, más me acerco a la felicidad.
No hay riqueza ni belleza que no se vea más grande si eres humilde.
Soy de esas personas que cuando ve un mensaje tuyo tiene un pequeño infarto.
Confía en mi, pues esteadiós no significaráuna despedida definitiva.
Mi mamá es quien,con su inmenso corazón,siempre me protegió y me cuidó.
Que alegría poder verte y desearte un buen descanso después de este largo día. ¡Buenas noches, amor mío!
Agradezco por lo bueno de la vida y lucho para cambiar lo malo.
Si me gusta el lugar donde estoy me quedaré para florecer.
La humildad puede llevarte lejos, sin olvidar quien eres y hasta donde puedes llegar.
Queríamos agradecerles con sinceridad por su apoyo y por su confianza, ¡y desearles una feliz Navidad!
Se aprende a ser solidario,solo necesitas quererloy estar concienciado.
Enseñe a sus hijos a valorarse y amarse y crecerán con las mejores alas para volar.