Gracias Señor, porque consigues darme esperanzas cuando siento que todo está perdido, y eso me ayuda a salir adelante.
Todo lo que siento hacia ti, Señor, es gratitud.
Le agradezco al Señor por la familia que tengo: bondadosa, afectuosa y respetuosa.
Voy a dejar de ser una persona controladora y dejar todo en tus manos, Señor.
Hay algo de lo que no me olvido en mi vida, y es de no juzgar a los otros porque es algo que no quisiera que mi hicieran a mi.
Cuando pienso en todo lo que hiciste por nosotros, me lleno de inspiración para ser mejor.
La fe viene de la mano del amor y juntas nos llevarán hacia un mundo mejor.
No recuerdo ni un solo momento de mi vida en el que Señor no haya estado presente.
Gracias Dios porque a pesar de no tener mucho, lo tengo todo.
Dios nos dejó la tierra y la naturaleza para que cuidásemos de ella.
Siento la protección de Dios cada día, y de ahí saco mis fuerzas para vivir y seguir luchando.
La fe que le tengo a Dios, es algo tan increíble que solo Él y yo podemos entenderla.
Dios te regala siete días más para que hagas buenas acciones. ¡Bendecido inicio de semana!
Sigue confiando en Dios, pues él nunca te abandonará. ¡Buenas noches! Bendiciones
Te agradezco, mi Dios, por todas las bendiciones que ya recibí e iré a recibir, ¡pues sé que nunca me abandonarás!
Antes de dormir siempre agradezco a Dios, pues sé que él hace todo lo mejor para ti. ¡Buenas noches y bendiciones!
Que Dios te brinde un sueño profundo y reparador, y que mañana despiertes con muy buen humor. ¡Buenas noches! Bendiciones.
Mi Dios, tú le das razón a mi vida, contigo aprendo todos los días algo nuevo que mantiene mi felicidad.
Cada día Dios me sorprende con alguna maravilla, un paisaje o alguna compañía.
Dios me ayuda a saber que puedo alcanzar todo lo que puedo imaginar.