Hermanos, aprendí a vivir con ustedes, y cuando me tenga que ir lejos los voy a extrañar hasta el cielo.
Que orgullo es poderdecir que no solo eresmi hermano, sino tambiénmi amigo y compañero.
Pase lo que pase, tengo una cosa clara en la vida, y es que siempre cuidaré de mis hermanos.
Siempre tanfuerte y valiente,eres el mejorejemplo para mi.¡Te quiero, hermana!
A pesar de todas nuestras discusiones,siempre serás mi hermano, y una de laspersonas que más quiero en el mundo.
Si bien es cierto quela familia no se puede elegir,también lo es queyo te elegiría a ticon los ojos cerrados,una y mil veces, hermano.
No hay nadie ni nada quepueda contra los hermanosque se mantienen unidos.
Una de las cosas que másme gusta de esta vida es…¡tener hermanos!
Es inevitable discutir contigo, pero aún así te valoro como a nadie más, hermano.
No hay aventuras como lasde la infancia, sobre todo si escon tus hermanos.
¿Quién no ha imitadoen algún momento a sushermanos o ha sentido quele estaban imitando?
Puedo pelearme mil veces contigo, pero te haré reír mil y un veces para que me perdones.
La vida me dio un hermano de sangre y otro de elección, y ese eres tú, ¡mi mejor amigo!
La navidad fue hecha para pasar tiempo con nuestros seres queridos, incluidos esos amigos que son como hermanos. ¡Feliz navidad!