Hay días en los que la vidapesa tanto que apenas podemoslevantarnos y seguir caminando.
Me cansé de darlo todopor los demás, y ahoralo digo bien claro,¡ya no puedo más!
A veces me siento mejor,pero los pensamientosnegativos vuelven a aparecer.
Hay veces en las que sientoque todo es demasiado difícily no sé como avanzar.
Poco a poco me fui dandocuenta que estaba más solo,y mi corazón más vacío.
Pensar en los golpes que me dio la vida hace que me invada la tristeza y el desaliento más profundos.
La depresión vienesigilosamente, ymuchas personas nose dan cuenta que llegó.
Me llena de tristeza vertantas promesas rotas,y tantos sueños sin cumplir.
Ojalá algún día encuentreeso que ansío tanto, yque se llama felicidad.
Por suerte o por desgracia,ya he aprendido que eneste mundo hay personas malas.
La depresión puede llevartea estados de introspeccióna los que nunca anteshabías llegado.
Hasta cuando hay sol, me cuesta ver los rayos de luz.
No importa lo queme digan, pues enocasiones siento quevoy a la deriva.
Muchas veces mepregunto que haré cuandono me queden fuerzaspara seguir adelante.
Cuando parecía quetodo se iba a solucionar,todo volvió a salir mal.
Estos últimos tiempos me hicieron entrar en depresión, y ahora intento no caer a cada paso que doy.
La vida me ha hecho ver que cada día soy más pesimista.
Me duele pensar queno aproveché lo suficienteel tiempo que tuve junto a ti.
Sé que no debo sentirmiedo, pero ahoramismo, todo me asusta.
Me pregunto cada díaque puedo hacer parallenar el vacío que siento,espero encontrar la respuesta.