Fue triste darme cuenta de que por mucho que te amase no me hacías bien y nunca me lo ibas a hacer.
La tristeza me acompañó mucho tiempo porque demoré en darme cuenta de que me harías sufrir.
Fue triste alejarme de ti, pero me di cuenta de que no me amabas tanto como yo a ti.
Es triste saber que a veces el amor es un juego en el que uno sale perdiendo.
Sé que la tristeza que dejaste en mi corazón necesita mucho tiempo para curarse, porque es profunda e inmensa.
Desde lo más profundo de mi corazón sé que esta tristeza que me haces sentir, será un incentivo para una nueva etapa feliz.
Una de las mayores tristezas es tener que alejarse de lo que uno ama.
Tuve que pasar por la tristeza del desamor, pero ahora miro al futuro con fuerza y con las esperanzas de que todo sea mejor.
Siento las tristezas profundamente, y si me traicionas, sé que lloraré.
No permitas que la tristeza de un día te haga olvidar la alegría de los otros.
Las tristezas del amor pueden quedarse para siempre en nuestro corazón.
Es triste decir que no hubiera apostado por nuestro amor si hubiera sabido que lo nuestro acabaría así.
La tristeza de saber que ya no me amas es tan grande que es incalculable.
Es triste tener que asumir que cada vez queda más lejos ese tiempo en el que me amabas y nos hacíamos felices mutuamente.
Lo más triste de lo nuestro fue que yo pensé que amaba a alguien que realmente no existía como yo lo veía.
He tenido tantas tristezas que ya no recuerdo lo que era la felicidad.
Este amor duró tan poco que sin darme cuenta seguí soñando con él durante algún tiempo, sin embargo, sé que la tristeza no me invadirá y lo superare rápidamente.
Puedes caer en la tristeza, pero debes saber que se puede salir.
La decepción va de la mano de la tristeza, porque cuando nos decepcionan, nos hacen daño.
A veces la soledad y la desilusión son mis únicos acompañantes.