Jesús amado, no me queda más que agradecerte por todo, pues tú has guiado mi vida y la has llenado de amor y alegría.
Siempre hay algo en lo que podemos superarnos, y para mi, esa es la gracia de la vida.
Hacer locuras es parte de la vida, ¡Y la hace más divertida!
Mirar con los ojos de un niño es descubrir todo lo bueno de la vida.
Solo pocas personas son consideradas realmente especiales en mi vida.
Buenas noches, amiga, hoy antes de irme a dormir quería dar gracias porque te tengo en mi vida.
A veces somos frágiles para aguantar los golpes de la vida. En esos momentos yo recurro a la oración, porque sé que Dios me escucha y eso me da energía.
Dedicar aunque sea un instante de mi vida para pensar en ti es mi momento favorito de todos los días.
No importa si es jueves o si es viernes, ¡Agradece siempre que tienes un día más de vida!
Agradezco a Dios por hacer que mi camino en la vida sea perfecto.
Ojalá pudiera compartir también tus sueños, porque el resto de mi vida ya es de los dos. ¡Buenas noches!
A veces pienso que lo más importante de esta vida es ser humilde y saber agradecer.
Eres el héroe de mi vida, pero también de mis sueños. ¡Buenas noches, mi amor!
Aprendí a agradecer en la infancia y creo que es uno de los mejores aprendizajes de vida.
Ya me harté de decepcionarme y estar triste, pero es que en esta vida nunca se sabe cuando va a ser la última vez.
Nadie mejor que tú para compartir mi vida, ¡te amo!
Corre, salta y juega que la vida vivida con diversión es mucho mejor.
Que tengan una noche tranquila y de descanso, y no olviden que son una parte esencial de mi vida. ¡Buenas noches, amigos!
Señor mío, Jesucristo, dame las fuerzas cuando me falten e inspírame con tu buen hacer para poder vivir una vida mejor.
Una amistad que se sostiene con respeto y amor es el mejor regalo que la vida te puede dar.